
Vida: yo soy yo y mis circunstancias
Purgatorio constante donde lo que no vives, no está muerto, pero si inexistente, con lo cual no está vivo. Sólo tengo una vida, y como “yo soy yo y mis circunstancias”, opto por intensificar el cielo terrenal y desdramatizar el infierno cotidiano.
Si simplemente estamos en el mundo con nuestro cuerpo y alma a la par una vez indefinida, es estúpido posponer acontecimientos y resignarse en pro de la paz interior bajo tierra, creo firmemente y a ratos un poco torcida, en el destino.
Siempre que planeo, me ilusiono con satisfacer mis principios. Al llegar a los finales, en POCAS ocasiones me siento completamente orgullosa y en la inmensa mayoría decepcionada por no conseguir los propósitos.
Pero es absurdo pensar en línea recta, pues la tierra está cubierta de grietas, socavones, volcanes y si te coge la lava, directamente ardes y arder no es tan malo ni tan bueno, simplemente es la alternativa que tu vida te plantea, porque ella manda y tú sólo parece que la diriges.
Propongo darle la vuelta a las cenizas, y plantarse en barbecho, (si te ves muy quemada). Así fertilizarás en tu momento y sólo cuando te apetezca buscaras más jardines. Por supuesto que la belleza de las flores tiene aroma a indiferencia, y las espinas de las rosas son las que marcan su atractivo. Del polen nace la miel, y su dulce puede ser permeable al empalago o perdurable en el paladar.
A menudo repito errores y no sólo vuelvo a caer en la misma piedra, sino que a la próxima directamente me rebota en forma de brecha. Entonces voy a urgencias y me atienden, me escuchan, anestesian mi dolor ante la espera de ser cuidada y al final del día, aprendo hasta de medicina. Curación del alma a base de seguir tropezando. Despiste de supervivencia por cruzar en rojo. Pero es que los semáforos a veces también se equivocan, y arriesgarse en ámbar, no tendría gracia.
Me he confundido tanto, que a veces pienso que mi inconsciente es el que se equivoca, y mi conciencia la única pobre que está de los nervios, pero al vivir el error, que no de él, me veo viva, y como sólo hay una, y ésta es la mía, intento disfrutar de la sorpresa.
Diana Gª Marugán

Como hacer de tú hijo un delincuente

Vivir peligrosamente, en la violencia de la paz
También te puede interesar

Voluntarios para apoyar Haití, mediante Cruz Roja
31 enero, 2010
I Premio Internacional Revista Que Leer Volkswagen
18 junio, 2008
4 Comentarios
sandra (la de elda)
Hola guapisima, estas hecha una artista y sabes q aunq no nos veamos tienes mi apoyo para tu gran carrera, animo y sigue asi¡¡¡
un besazo guapa
DIANA Marugán
Silvina, lo primero gracias por tus palabras.
Para ponerte en contacto conmigo, escribeme a mi mail. dianamarugan@hotmail.com, ya que no veo tu mail y no puedo responderte.
Al resto GRACIAS por vuestras palabras.UN BESAZO DIANA
silvana ortiz
hola diana me encanto el articulo de VIDA soy fan{atica de ese tipo de reflexiones de vida. si tenes material me encantaria me lo envies o me contestes de donde lo puedo obtener. quiero saber de donde sos.
Keina
Muy interesante su articulo..
Un saludo