Vivir me sabe a vergüenza
Hoy como tantas veces, vivir me sabe a vergüenza. Queridísimo señor juez, no sé si usted me dará la venia o si simplemente el pudor ante semejante error le será suficiente para bajarse del carro de la justicia, que ilusa…
Hoy como tantas veces, vivir me sabe a vergüenza. Queridísimo señor juez, no sé si usted me dará la venia o si simplemente el pudor ante semejante error le será suficiente para bajarse del carro de la justicia, que ilusa…